En contra del gobierno federal y del comité organizador, un juez federal brasileño habilitó las protestas y la libre expresión en los JJOO.
Luego de varias denuncias y reclamos públicos, finalmente el juez Joao Augusto Carneiro de Araújo prohibió a la fuerza pública “reprimir y expulsar a los espectadores que lleven consignas ideológicas o partidarias”.
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— Olympics (@Olympics) 9 de agosto de 2016
El fallo judicial tiene carácter “urgente” y de “aplicación inmediata” ya que busca “garantizar la libre manifestación pacífica de cuño político en lugares oficiales”: también fijó una multa de unos 3.500 dólares por cada acción policial que viole la decisión.
De ahora en más, las fuerzas de seguridad deberán abstenerse de retirar a las personas que se estén manifestando pacíficamente, ya sea con “carteles, camisetas o con otro medio lícito permitido durante los juegos”.