En otro guiño político al sector castrense, el primer mandatario argentino participó de las cena de camaradería del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea.
“En esta nueva que hemos iniciado nos propusimos alcanzar la pobreza cero, derrotar al narcotráfico y unir a los argentinos. En estas tres premisas las Fuerzas Armadas jugarán un rol preponderante y participativo”, destacó Mauricio Macri al comenzar su alocución.
El “anuncio” del primer mandatario es importante en más de un sentido: las tareas que el presidente quiere que asuman las FFAA están inhabilitadas por las leyes de Defensa y de Seguridad Interior.
“Estamos muy contentos con el profesionalismo que los militares argentinos cumplieron en las misiones de los Cascos Azules de la ONU”, prosiguió el presidente ante el salón repleto de miembros de las tres fuerzas.
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“Cumplieron un rol muy importante en Haití, Ecuador y lo harán en Colombia, donde 75 de nuestros soldados supervizarán el Proceso de Paz que comenzó en ese país. Es importante tener Fuerzas Armadas capaces de contribuir con la integración de Argentina al mundo”, agregó.
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Por último, y dejando de lado la polémica aparición de Aldo Rico y militares que defendían el “Operativo Independencia” en Tucumán, señaló: “Con las bandas militares que desfilaron en Buenos Aires y Tucumán vimos el afecto de los argentinos por sus Fuerzas Armadas. Podemos estar tranquilos porque ellas cuidan nuestro espacio aéreo, marítimo y territorial”.
Vale la pena recordar que distintas organizaciones sociales, de derechos humanos y de ex combatientes de Malvinas repudiaron la presencia de dichos personajes: “Que el Gobierno conceda espacios públicos a quienes atentaron contra el orden constitucional y hacen apología de crímenes aberrantes es un agravio a la democracia que la Argentina ha consolidado con mucho esfuerzo durante décadas”.
