La junta interna de ATE del área de “Promoción Social” criticó el estado en que se encuentran los programas sociales impulsados desde el gobierno.
“Recortó, tercerizó y fragmentó”, artículo de Página12 sobre la Emergencia en el Ministerio de Desarrollo de Ciudad: https://t.co/Ash7Qh87oo
— ATE Promoción Social (@ATE_PromSocial) 20 de junio de 2016
“Todo esto es consecuencia de un deterioro sistemático que, en nombre de la eficacia y la eficiencia, desgastó, recortó, tercerizó y fragmentó las políticas sociales en la Ciudad. La gestión del PRO en los últimos ocho años desligó al Estado de sus responsabilidades como empleador y como garante de derechos para la población más vulnerable. Esta es la pesada herencia del macrismo en la Ciudad de Buenos Aires”, aseguraron.
Según consigna en el informe, publicado en Página 12, las direcciones de “Mujer, Adicciones, Niñez y Adolescencia”, y en el “Programa Buenos Aires Presente” denuncian una vez más el “desmembramiento y falta de presupuesto de los programas destinados a trabajar con la población en situación de calle, con niñas/os y adolescentes víctimas de explotación sexual, en el abordaje del uso problemático de sustancias psicoactivas, y en la restitución y el fortalecimiento de vínculos familiares y comunitarios en villas de emergencia”.
En esta línea, remarcaron que los edificios destinados a las políticas sociales “están con goteras, plagas de ratas y cucarachas” y que faltan elementos indispensables y básicos para atender a las personas, como pañales, alimentos o medicamentos.
“Un palacio de cristal destinado a tareas administrativas se contrapone atrozmente con las dependencias donde se atienden problemáticas sensibles”, agregaron. En esta línea, advirtieron que actualmente las 17 mil personas en situación de calle son “abandonadas en pleno invierno por falta de camas o por criterios técnicos muy discutibles y que vulneran derechos humanos, como la falta de DNI”.
“Hay programas territoriales ‘para la foto’, que al poco tiempo de crearse se ven desbordados por falta de recursos profesionales”, apuntaron desde el área de adicciones. “No existen políticas integrales, articuladas y consistentes”, sentenciaron.