Los graves episodios de violencia entre hinchas rusos e ingleses recorrió el mundo y el organismo rector del fútbol europeo tomó cartas en el asunto.
La UEFA decidió descalificar a la Selección de Rusia de la Eurocopa 2016 por los hechos de violencia del último sábado en las calles de Marsella. Sin embargo, Muy al estilo FIFA – y, por supuesto, AFA – dejó la sanción “en suspenso” por lo que no se concretará a menos que haya nuevos incidentes.
“Se aplicará si se repiten incidentes de naturaleza similar en el interior de los estadios en cualquiera de los partidos de Rusia”, advirtieron los máximos dirigentes de la entidad.
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El Comité de Disciplina no pudo hacer la vista a un lado ante la cantidad de ataques, peleas violentas y desbandes que se produjeron en el choque contra Inglaterra en el sur de Francia: abrió, de hecho, un expediente por “enfrentamientos violentos, comportamiento racista y uso de bengalas y material pirotécnico”.
También se impuso una multa de 150.000 euros a la Federación Rusa específicamente por los incidentes registrados dentro del estadio Velódromo tras el cotejo que culminó igualado 1 a 1 por el “Grupo B”.
Ante la creciente oleada de xenofobia, discriminación y violencia, muchos dudan de que una medida tan endeble – y un falo-amenaza que no se concretó – logren parar con el accionar de los distintos grupos radicalizados. Para colmo, los ataques y las peleas no son patrimonio exclusivo de rusos e ingleses: hasta en el partido entre Alemania y Lituania hubo choques callejeros. ¿Seguirá desbordándose el “estado de ánimo” europeo en los pliegues del torneo continental más importante?
