Luego de jugar cinco minutos ante Nacional de Montevideo, el delantero se cruzó feo con el técnico del equipo y la CD le bajó el pulgar.
A Daniel Osvaldo le arrojaron un proyectil mientras precalentaba para entrar: mientras se lo mostraba al árbitro asistente, Guillermo Barros Schelotto se enojó con el y lo retó.
Jugó cinco minutos en su vuelta tras la lesión en el “Gran Parque Central” y decidió irse al vestuario solo, sin esperar ni siquiera a sus propios compañeros. Según trascendidos internos, el resto de los jugadores y el cuerpo técnico lo encontraron fumando un cigarrillo: algunos hablan de golpes de puño, insultos y empujones pero lo que sí está confirmado es que la relación se rompió.
Este último viernes, la Comisión Directiva (CD) del club decidió – ante el pedido de los Schelotto y con el aval de los referentes Orión, “Cata” Díaz y Tevez – rescindirle el contrato. El segundo paso de Daniel Osvaldo por Boca Juniors terminó exactamente igual que el primero: mal.
“Llega el CT y los jugadores al vestuario, #Osvaldo se encierra en el baño y prende un cigarrillo, estando prohibido” Costa x @ClossAM590
— La12tuittera ⑫ (@La12tuittera) 13 de mayo de 2016
El semestre del delantero fue para el olvido: a mediados de febrero sufrió la fractura del quinto metatarsiano y, luego de jugar un partido infiltrado contra San Martín de San Juan para respaldar al “Vasco” Arruabarrena, Osvaldo tuvo que parar por algunas semanas.
Hace algunas semanas atrás, el atacante trabó dos veces la pelota con Pablo Pérez en un entrenamiento y cayó al piso con signos de dolor: tuvo que irse de la práctica descalzo y sin poder pisar el suelo. Los doctores del club confirmaron luego que se resintió de la lesión.
Desde que regresó a Boca a comienzos de enero tras su paso en Portugal, Daniel Osvaldo jugó apenas seis partidos oficiales: contra River en el verano, contra San Lorenzo por la Supercopa Argentina y ante Atlético Tucumán, San Martín de San Juan y Lanús por el torneo local. El último fueron esos cinco minutos ante Nacional de Montevideo por la Copa Libertadores. En ninguno pudo marcar goles: magros resultados para un “9” con mucha clase.