A través de la canciller Susana Malcorra, el gobierno de Mauricio Macri dejó sentada su posición tras el desplazamiento de Dilma Rousseff.
“Ante los sucesos registrados en Brasil, el gobierno argentino manifiesta que respeta el proceso institucional que se está desarrollando y confía en que el desenlace de la situación consolide la solidez de la democracia brasileña”, señalaron en un comunicado que emitió Cancillería.
“En tal sentido, el gobierno argentino continuará dialogando con las autoridades constituidas a fin de seguir avanzando con el proceso de integración bilateral y regional”, añadieron en el texto.
Luego de varias idas y vueltas, finalmente el Senado votó la apertura del “impeachment” contra la mandataria brasileña que fue apartada de manera interina por 180 días. El vicepresidente Michel Temer reemplazará a la mandataria electa hasta que se resuelva el juicio político.