Atlético Nacional le ganó 4 a 2 a Huracán como local y clasificó a los octavos de final del torneo: Ibarbo, Guerra (2) y Copete marcaron para el “Verde Paisa”.
El nombre Argote quedará en la memoria de los hinchas de Huracán y los amantes del fútbol argentino: el árbitro venezolano perjudicó al “Globo” durante los noventa minutos y monedas jugados en el “Atanasio Girardot”.
El equipo de Parque de los Patricios dejó la vida en Colombia ante Atlético Nacional: luchó, jugó y once contra once tuvo el partido bastante controlado mientras el microclima se lo permitió.
El clima se enrareció cuando Argote cobró un penal inexistente para los colombianos en la primera parte; sin embargo, el rápido empate del “Globo” a través de Cristian Espinoza calmó los ánimos de los dirigidos por Eduardo Domínguez.
Fue la injusta expulsión de Mancinelli en el segundo tiempo la que torció definitivamente el rumbo del partido: puso aún más nerviosos a los jugadores de Huracán y pavimentó el triunfo de los locales. Sólo el tremendo golazo de “Wanchope” Ábila para descontar le dio algo más de ánimo a un equipo ya diezmado y cansado.
El final del partido con golpes y problemas entre los jugadores de ambos equipos y árbitros fue la condensación de lo que se vivió durante toda la noche: un equipo sobrador como Atlético Nacional al que finalmente no le sobró nada; un árbitro impresentable a la altura de la CONMEBOL y un conjuno argentino que, luego de meses de sobreponerse a accidentes, un calendario apretado y un plantel corto, dijo basta en suelo colombiano.
