En un partido entretenido y dinámico, la “Academia” igualó 3 a 3 con Tigre en Avellaneda y quedó a la expectativa de lo que suceda con Lanús.
El equipo de Facundo Sava volvió mostrar dos caras bien contrapuestas: un ataque demoledor y una defensa cada vez más endeble.
La “Academia” manejó los hilos del encuentro durante los noventa minutos pero nunca pudo parar la pelota y tener algo de tranquilidad: jugó a un ritmo frenético que le dio su mejor cara en ofensiva pero demasiados problemas en el fondo.
El paraguayo Romero abrió la cuenta para el conjunto local pero ni siquiera el gol prematuro le dio respiro. Inmediatamente, Rincón se le escapó a Grimi y estampó la igualidad. Cuando Racing se volvía a acomodar en el campo, el “Chino” Saja tuvo un grosero error al intentar salir con los pies, la perdió y dejó que Federico González ponga la ventaja para los de Troglio.
Los de Avellaneda no pararon de perderse situaciones claras de gol – con pelotas en los palos y sacadas en la línea – durante todo el primer tiempo y buena parte del segundo.
Cuando Luciano Aued marcó desde afuera del área las cosas parecían encaminarse pero Racing no pudo con su genio: dejó libre a Rincón tras un córner y, tras ganar en velocidad, volvió a dejar de rodillas a la defensa “académica”.
El segundo tiempo fue un monólogo de chances desperdiciadas por los dirigidos de Facundo Sava mientras Tigre salía peligrosa y rápidamente de contra ante cada embate del local. Recién en el último minuto de descuento la “Academia” consiguió lo que buscó incansablemente: el tanto del empate. Fue Rciardo Noir quien, tras una definición rara y un rebote, puso la igualdad definitiva.
