Tanto la Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas (ONU) como Médicos Sin Fronteras (MSF) rechazaron ser parte del acuerdo entre la Unión Europea y Turquía.
La ONU confirmó que suspenderá todas sus actividades en los centros de refugiados de Grecia debido a que, a partir del acuerdo turco-europeo, ahora serán usados como centros de detención para enviar a las personas devuelta a Turquía.
“No vamos a ser parte de esto; no queremos vernos envueltos en devoluciones y detenciones. Sólo vamos a continuar asistiendo a las autoridades griegas en lo que respecta a facilitar la recepción de migrantes”, señaló Melissa Fleming, responsable del área de refugiados de las Naciones Unidas.
La crisis de refugiados sigue resquebrajando los cimientos de la Unión Europea | https://t.co/pikxTcu8pI pic.twitter.com/lHhshSolCt
— Diario de BA (@diariodeBA) 21 de marzo de 2016
En la misma línea, desde Médicos Sin Fronteras (MSF) advirtieron que no quieren verse involucrados en la expulsión de miles de refugiados ya que contraviene leyes internacionales.
“No vamos a permitir que nuestra asistencia sea instrumentalizada para una operación de expulsión masiva. Nos negamos a ser parte de un sistema al que no le importa la protección de aquellos que piden asilo ni la parte humanitaria”, sentenció Marie Elisabeth Ingres, quien encabeza la delegación que supervisa las acciones en tierras helénicas.
