Al menos diez personas murieron y otras 15 resultaron heridas el último martes en una potente explosión en una plaza turística de Estambul, Turquía.
Los hechos sucedieron en la plza principal del barrio turístico de Sultanahmet, cerca de la basílica de Santa Sofía y de la Mezquita azul, en Estambul.
La policía local evacuó la plaza y confirmó la muerte de diez personas, tanto de origen turco como extranjeros. Hay, además, quince heridos de gravedad.
Autoridades turcas investigan tipo de explosivo. #EstadoIslámico y #PKK entre sospechosos. https://t.co/zWCp6hoJ9u pic.twitter.com/i9VjNtd3MM
— Cristina Cubas (@dwcubas) enero 12, 2016
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, se mostró enfadado tras el ataque: “Condeno duramente este atentado terrorista. Turquía es el blanco principal de todas las organizaciones terroristas activas en la región”, señaló.
“Por las primeras informaciones de inteligencia, el ataque fue llevado a cabo por un hombre-bomba de orígenes sirios”, apuntó el primer ministro. Minutos después del ataque, el Gobierno turco decidió prohibir a los medios de comunicación distribuir videos o fotos relacionados con el atentado.
