Pese al cese momentáneo de las precipitaciones constantes, el comportamiento de los Ríos Paraná, Uruguay y Paraguay sigue sin estabilizarse: todavía hay miles de evacuados en el litoral argentino.
El Río Paraná volvió a crecer a la altura de la Provincia de Chaco y los aproximadamente 6.000 evacuados que se registran en la zona deben aún permanecer fuera de sus hogares.
Según la Administración Provincial del Agua, que el nuevo repunte del río se debe a “las precipitaciones registradas en el sur de Brasil, Paraguay y noreste de Argentina”.
La situación en Chaco sigue siendo crítica, además por el comportamiento y la nueva crecida del Río Paraguay: las poblaciones de Puerto Bermejo, General Vedia, Las Palmas e Isla del Cerrito también se ven afectadas.
En Formosa, las autoridades provinciales confirmaron que unas 5 mil personas, entre ellas unos cien ciudadanos de la vecina localidad paraguaya de Alberdi, continuaban siendo asistidas en más de 12 centros de evacuados distribuidos en la provincia.
Por otra parte, el panorama en Concordia es un poco más favorable y comenzó el lento regreso a sus casas de buena parte de los evacuados: las autoridades están trabajando en la adecuación de las viviendas en las que el agua se retiró.
Además, por recomendación de las autoridades sanitarias se repartían kits de limpieza y pintura, así como también se vacunaba en forma preventiva a las personas.
Mientras tanto, el mismo Río Paraná si comenzó a descender a la altura de la Provincia de Santa Fé: de todas formas, el gobierno provincial confirmó que aún se encuentran evacuadas en refugios municipales un total de 158 familias (550 personas).
