Hace poco más de dos semanas, un agente de la Policía Metropolitana le disparó tres veces a Lucas Cabello en el barrio de La Boca.
“Desde el día del hecho que la Metropolitana está instalada en el lugar. Esto va en contra de lo que tiene que hacer una fuerza de seguridad investigada”, aseguró uno de los abogados querellantes, Nahuel Berguier, a Infojus Noticias.
“Además del hostigamiento que surge de la propia causa, hay un contexto previo de violencia hacia los vecinos”, agregó. Según consta en la causa, varios vecinos relataron cómo los agentes de la fuerza metropolitana los “amenazaban y apuntaban con armas” en la semanas y meses previos al ataque contra Cabello.
“En vez de restituir derechos, en un clima de tensión social, el lugar estaba en situación de policialización. Eso sumó más violencia”, argumentó Berguier.