Una vez más, y en medio del escándalo internacional, la empresa automotriz decidió la suspensión de buena parte de los empleados que trabajan en la planta de Córdoba.
La automotriz Volkswagen confirmó, entonces, que suspenderá a parte del personal que se desempeña habitualmente en su planta de Córdoba: la medida alcanza al 40% del total de los empleados.
Los operarios que trabajan en la fábrica de cajas de cambio – y se desempeñan en las líneas MQ200 A y B – “dejarán de trabajar el próximo 16 y retornarán a sus puestos el 2 de noviembre”.
Según la empresa, la suspensión de empleados se debe a “la caída de la industria automotriz brasileña” y, por ende, la “baja de las exportaciones”.