El domingo por la noche, un policía que manejaba en estado de ebriedad chocó en contramano a otro auto sobre el Camino del Buen Ayre, a la altura de Hurlingham.
La irresponsabilidad y negligencia del uniformado terminó provocando la muerte de una mujer y su hija de cuatro años, quienes iban viajando en el auto embestido.
“Me peleé con mi mujer y tomé de más”, declaró luego en la seccional el policía del Comando de Prevención Comunitaria de San Martín (CPC). El hombre quedó detenido por homicidio simple reiterado y lesiones.