La madre Lucas Menghini Rey, el joven muerto el 22 de febrero de 2012 junto a decenas de personas en una formación de la línea Sarmiento en Once, habló sobre las responsabilidades políticas de la tragedia.
“La Tragedia de Once fue gestada durante años de desidia y corrupción, de empresarios y funcionarios que por acción u omisión permitieron que el servicio de la línea Sarmiento se fuera convirtiendo en una trampa mortal en la que diariamente miles de usuarios arriesgaban su vida para cumplir con sus obligaciones, trabajar o estudiar”.
“Quedó sobradamente probado que los empresarios utilizaron el servicio concesionado para enriquecerse, y que los funcionarios que debían controlar, los bienes, el cumplimiento del contrato, el dinero que entregaban… decidieron mirar para otro lado, demostrando un profundo desprecio por la vida de los usuarios”.
“Quedó demostrado que las denuncias de usuarios y trabajadores, al igual que los informes de la AGN fueron deliberadamente desoídos para poder continuar con el entramado mafioso que, sostenido en el tiempo, generó las condiciones para que el impacto del Chapa 16 se convirtiera en una de las mayores tragedias ferroviaria de nuestro país”.
“El gobierno decidió desde el primer momento oponerse a la verdad a como diera lugar. Deslindó su responsabilidad culpando al maquinista, a los pasajeros, al día, etc. Eligió sostener la mano de los corruptos y abandonar a los familiares de víctimas y heridos aún cuando la justicia le ordenó se nos brindara asistencia integral”.
Fuente: APEL (Asociación de Profesionales en Lucha) http://bit.ly/1Ki7UIT
