Cientos de personas continúan aisladas en la Provincia de Buenos Aires por las inundaciones tras el desborde del Río Salado.
Según los especialistas, el Río Salado del Sur, que nace en Santa Fe y cruza desde el oeste al centro norte bonaerense, tuvo una fuerte crecida en las últimos días producto del agua acumulada en las cuencas superiores por las fuertes lluvias de hace dos semanas.
El desborde del río hizo que las aguas afectaran y cubrieran buena parte de las rutas y campos de las ciudades bonaerenses de Dolores, Coronel Brandsen, Monte y Pila, entre otras.
En esta última localidad se está dando una de las situaciones más críticas. El intendente local, Gustavo Walker, advirtió que tiene “un 70% del distriro bajo el agua”.
“Lo que nos complica mucho es la cantidad de animales, 320 mil cabezas que la gente ha tratado de sacar a un lugar seguro para proveerlas de rollos y de maíz pero mucha hacienda se está ahogando”, señaló.
La ruta provincial 57 quedó cerrada al tránsito hoy en inmediaciones de la Autovía 2 y la ruta 41. También se encontraba complicado el tránsito en las rutas 29 y 65, donde se circulaba con precaución por la presencia de agua sobre la calzada.
Según informó Defensa Civil, la ruta 29 se encuentra “afectada por la presencia de agua en distintos tramos de su traza y tiene banquinas inestables, por lo que el tránsito se habilita únicamente de día y se cierra a partir de las 22 entre las localidades de Ranchos y General Belgrano”. Por otra parte, la ruta 65 también presenta agua en las banquinas en el tramo que va de Junín a General Viamonte.
