La Asociación Civil Transporte Automotor (ACTA), la Cámara del Transporte de la provincia de Buenos Aires (CTPBA), la Cámara Empresaria de Pasajeros (CEAP) y la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (CETUBA) cargaron contra los trabajadores de la línea 60 a través de un comunicado.
“No existe en la actualidad ningún conflicto de orden laboral que justifique la realización de una medida de fuerza absolutamente ilegítima e ilegal”, advirtieron.
En este sentido, las cámaras empresarias culparon a “los delegados y un pequeño grupo que los sigue, que respondiendo a intereses políticos e ideológicos continuaron denunciando conflictos inexistentes, extorsionando y procurando perjudicar a la empresa con medidas desleales y abusivas, como el no cobro de pasajes”.
Según el comunicado, los trabajadores buscna “debilitar y dañar económicamente” a la empresa MONSA, para “luego manejarla por su propia cuenta, pretendiendo inclusive utilizar para eso los vehículos e instalaciones que son legítima propiedad de la compañía”.
“La excusa para generar el conflicto actual se originó en el despido de un conductor que a lo largo de tres años tuvo doce accidentes de tránsito, algunos con varios heridos. Al dictarse la conciliación obligatoria, la empresa retrotrajo el despido”, sentenciaron.