Con el apoyo de todos los bloques, la Legislatura porteña decidió aumentar las multas para quienes tapen la patente del auto.
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires elevó la penalización económica para aquellos que procedan con el ocultamiento de la patente mediante el uso de “papeles, discos compactos, calcomanías e incluso su reemplazo” para evitar sanciones fotográficas.
La multa fue elevada de 300 a 1000 unidades fijas para quien dificulte la visualización de la chapa patente. Las unidades fijas, establecidas por el Gobierno de la Ciudad, equivalen a la mitad del precio del litro de nafta de mayor octanaje ($13,68): la sanción más dura llegaría a los $6.800.
“Hay multas que se hacen por distracciones y el conductor no tiene malas intenciones. Pero esto es premeditado, la persona que sale a la calle con la patente tapada es alguien que sabe que va a violar la ley y no quiere que lo reconozcan”, aseguró Roberto Quattromano, legislador del PRO y autor de la iniciativa. “El objetivo es lograr que se eviten estas prácticas, que dificultan la identificación de los infractores”, añadió.
