El gobierno de Alexis Tsipras propuso en las últimas horas un nuevo acuerdo de dos años al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEE) para intentar cubrir necesidades financieras y reestructurar deuda.
Horas antes de que venza el plazo límite para saldar la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el gobierno de Grecia se dirigió al Mecanismo Europeo de Estabilidad, organismo intergubernamental creado por el Consejo Europeo, y le propuso un nuevo programa de rescate de dos años de duración.
En la misiva enviada a Bruselas, Tsipras pidió por la continuación de “un descuento sobre el impuesto al valor agregado para las islas griegas, la extensión de recortes al gasto militar y el retraso en el retiro de un suplemento de ingreso para algunos de los jubilados más pobres”.
Además, en la propuesta, el gobierno griego cede en cuanto a los subsidios a los pensionistas de bajos ingresos: está dispuesto a eliminarlos completamente a partir de 2019, en lugar de sustituirlos por otras ayudas, pero rechaza la exigencia de la Troika de recortar con efecto inmediato en un 20 % el colectivo de personas que puedan beneficiarse de estos pagos.
“Como notarán, nuestras enmiendas son concretas y respetan cabalmente la solidez y credibilidad del diseño del programa general”, escribió el líder de Syriza.
La primera reacción de los principales acreedores griegos – es decir, la Comisión Europea, así como los líderes de Francia y Alemania, Francois Hollande y Angela Merkel – no fue la esperada por el equipo económico de Tsipras. Tras una nueva reunión este miércoles, decidieron cerrar el tema hasta el lunes, luego de que tenga lugar el referéndum.
Jeroen Dijsselbloem, presidente del Eurogrupo, lo confirmó en una entrevista: “Debido a la situación política, el rechazo del gobierno griego de las últimas propuestas y el referéndum que tendrá lugar el próximo domingo, no vemos terreno para seguir con las charlas”.
“No va a haber más charlas en los próximos días, ni a nivel del Eurogrupo, ni con las autoridades griegas o institucionales. (…) Simplemente vamos a esperar los resultados del referéndum y tomar en cuenta lo que salga de ello”, agregó.
En la primera reunión de emergencia del Eurogrupo advirtieron que les llevará tiempo estudiar la petición de un “tercer rescate de 29.100 millones de euros con los que hacer frente a los vencimientos de la deuda entre 2015 y 2017”. En esta línea, aseguraron, además, que por el momento no lo aprobarán hasta que tenga lugar el referéndum del próximo domingo.
Pese al vencimiento del plazo de pagos, el futuro inmediato de Grecia es aún una incógnita: el Fondo Monetario Internacional (FMI) lo decretó en “mora” – no en “default” – por no efectuar el desembolso que agrupa tres pagos de junio.
En la carta enviada por Alexis Tsipras a las autoridades de la Unión Europea en Bruselas, el primer ministro griego había pedido la extensión del actual rescate por un “corto período de tiempo” para evitar dificultades técnicas ligadas al “default”. Sin embargo, los miembros del Eurogrupo decidieron no prorrogarlo.