La fiscal general de los Estados Unidos, Loretta Lynch, y el fiscal del Distrito de Nueva York, Kelly Currie, hablaron en conferencia de prensa: “Estamos determinados a poner fin a la corrupción en FIFA”.
“Dos generaciones de directivos de fútbol de federaciones dependientes de la FIFA han estado utilizado sus posiciones dentro de las organizaciones para pedir dinero y derechos comerciales de los torneos”, aseguró en conferencia de prensa.
La fiscal general advirtió que este tipo de actividad ilegal se produjo “año tras año” y que, según sus estimaciones, la suma total del dinero fraudulento es de, al menos, 150 millones de dólares.
“Las investigaciones revelaron que lo que debería ser una expresión del deporte, fue usado como un vehículo para una red mayor de llenar los bolsillos de ejecutivos con sobornos que totalizan 110 millones de dólares”, sentenció Lynch. “Ellos corrompieron los negocios del fútbol a nivel mundial para servir a sus intereses y para enriquecerse”, agregó.
Por su parte, Kelly T. Currie, fiscal del Distrito de Nueva York reveló que los empresarios de marketing que tienen pedido de captura internacional “abiertamente pagaban sobornos para proteger sus contratos”.
“Son contratos de torneos que se repiten año tras año, y hemos visto que se incrementa el valor de los contratos y también en de los sobornos”, ratificó.