La hermana de Luciano Arruga, Vanesa Orieta, cerró su declaratoria antes del veredicto en la causa por torturas cometidas contra el joven en 2008 por el policía de la bonaerense Julio Diego Torales.
“Hoy lo que queremos es escuchar una condena. Luciano estuvo detenido 10 horas, eso no se puede negar. Espero que la Justicia entienda que eso no es una normalidad”, aseguró en Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3.
“Esto no se trata de una manzana podrida: es una institución que está destinada a controlar a los jóvenes pobres”, agregó Orieta.
“Si la condena es justa, por el respeto a otras causas, nos vamos a levantar e ir. Acá no hay nada que agradecer porque es la justicia que nos merecemos”, sentenció.
