En horas de la madrugada, el Senado de la Nación convirtió en ley el proyecto enviado por el Poder Ejecutivo para reestatizar los trenes y crear la empresa pública Ferrocarriles Argentinos.
El proyecto, que fue aprobado por mayoría en la Cámara de Senadores – respaldado por el Frente para la Victoria, el radicalismo, el PRO y el peronismo disidente -, declara de “Interés Público Nacional” y “objetivo prioritario de la República Argentina” a la “política de reactivación de los ferrocarriles de pasajeros y de cargas”.
En este sentido, el texto advierte que se busca la “renovación y el mejoramiento de la infraestructura ferroviaria” y la “incorporación de tecnologías y servicios que coadyuven a su modernización”.
Con 21 artículos, la nueva ley otorga al Estado la “plena administración de la infraestructura ferroviaria en todo el territorio nacional”, con potestad para “desafectar bienes, rescatar, reconvenir o renegociar contratos de concesión suscriptos con Nuevo Central Argentino, Ferroexpreso Pampeano, Ferrosur Roca, Metrovías y Ferrovías”.
Se establece, además, la “modalidad de acceso abierto a la red ferroviaria nacional” para la operación de los servicios de carga, de modo que “cualquier operador ferroviario pueda transportar carga con origen y destino en cualquier punto de la red, independientemente de quién detente la titularidad o tenencia de las instalaciones (en esos puntos de carga o destino)”.
Pese a ello, también hubo votos negativos y voces disidentes: miembros de SUR-GEN (Fernando Solanas) y el Frente Cívico de Córdoba (Norma Morandini) se mostraron en contra del proyecto.
“Tiene una trampa. Nunca se hizo una auditoría de inventario del millonario patrimonio ferroviario”, criticó Fernando “Pino” Solanas.
Días antes, en la Cámara de Diputados, miembros del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) denunciaron que la nueva ley encubría una “reprivatización”.
“Esto es una reprivatización del sistema. Se han robado 15.000 millones de dólares. Se está gobernando los ferrocarriles de manera macrista y están preparando para un gobierno macrista o de coalición”, aseguró, en ese entonces, Néstor Pitrola, del Partido Obrero.
