Tras el caso de espionaje revelado en los últimos días, el Gobierno Nacional citó al embajador británico para que dé las explicaciones correspondientes. Además, denunciaron a las petroleras que trabajan en las Islas Malvinas.
La Cancillería argentina, a través del vicecanciller Eduardo Zuain, informó que convocó al embajador británico Freeman para que dé explicaciones por el supuesto espionaje practicado – revelado a través del medio “The Intercept” y TN Noticias – entre los años 2006 y 2011.
Según se reveló en dichos informes, el gobierno británico realizó actos de espionaje a distintos líderes y jefes militares argentinos para conocer los planes y objetivos del país en relación a la disputa de soberanía por las Islas Malvinas.
En esta línea, el vicecanciller expresó al representante británico que las “acciones de ese tipo violan el derecho a la privacidad conforme a lo establecido en las resoluciones 68/167 y 69/166 de la Asamblea General de las Naciones Unidas”.
Asimismo, le comunicó que la Argentina “presentará una denuncia penal contra las empresas que llevan adelante actividades de exploración de hidrocarburos en la plataforma continental argentina”.