Organizaciones y partidos de izquierda cortaron escalonadamente los principales accesos a la Ciudad de Buenos Aires en función de cumplir con la medida de fuerza pactada para este 31 de marzo. Los mismos duraron alrededor de 5 horas.
Los principales partidos de izquierda y organizaciones sociales cortaron desde las primeras horas de la mañana los accesos a la Ciudad de Buenos Aires como parte del paro general nacional.
El bloqueo de la calzada en la autopista Panamericana comenzó a las 5 de la mañana; el piquete luego se replicó en el Puente Pueyrredón y en la autopista Santa Fe de Rosario.
A partir de las 7, comenzaron a ser bloqueadas la autopista Buenos Aires – La Plata y la esquina de Corrientes y Maipú. Hay piquetes, además, en Puente La Noria y en el Acceso Oeste – la esquina de Vergara y Gaona -.
Según detalló el PTS, también hubo cortes en el resto del país: “en el puente carretero de Cipolletti, Neuquén. En Córdoba el corte será en el Puente Centenario. En el edificio 4 de junio, frente a la municipalidad, en Jujuy. El puente Lucas Córdoba, en el acceso a San Miguel de Tucumán. En Mendoza, en San Martín y Vicente Zapata”.
“El piquete sirve muchas veces para aquellos compañeros que no tienen donde reclamar porque los echan. Es una muy buena excusa para no ir al trabajo, pero la verdad es que si querés ir a trabajar, te desvías dos cuadras y pasás”, argumentó el ferroviario Rubén “Pollo” Sobrero, en diálogo con La Red.
“Este paro es la defunción de la CGT oficial kirchnerista de Caló, porque los trabajadores se levantan contra la confiscación impositiva, inflacionaria y contra la ola de despidos”, agregó el diputado del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), Néstor Pitrola.
“Es una vergüenza que, mientras los empresarios ganan fortunas y se la siguen ‘llevando en pala’, la amplia mayoría de las familias obreras tenga que subsistir con la mitad de lo que hoy vale la canasta familiar”, señaló por su parte el dirigente del PTS, Christian Castillo.
