Luego de que el pasado el pasado martes 10 de febrero, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires intentara erigir el enrejado perimetral en el Parque Lezama, en el marco de las obras de puesta en valor del espacio verde ubicado entre los barrios de San Telmo, Barracas y La Boca; los vecinos lograron frenarlo al menos hasta que termine la mediación entre las partes.
En una reunión entre los representantes de la asamblea vecinal y el director de Espacios Verdes de la Ciudad de Buenos Aires, Guillermo Quintana, se firmó el compromiso en que la administración Macri afirma que no avanzará con el enrejado hasta que se llegue a un acuerdo.
“Negaron que la Comisión Nacional de Museos y Monumentos y Lugares Históricos hayan prohibido enrejar el parque pero nosotros les demostramos que no era cierto”, advirtió el vocero de la Asamblea de Parque Lezama, Mauricio García.
En esta línea, los vecinos evalúan presentar una denuncia contra el gobierno porteño ya que el enrejado no se encuentra contemplada en la licitación de las obras.
“No queremos un parque enrejado que divida a los tres barrios (Barracas, La Boca y San Telmo). El Parque Lezama no es solo San Telmo, parte del casco histórico, el parque es utilizado por los tres barrios por lo que hay que escuchar y tener en cuenta a los tres barrios”, aseguró García en diálogo con Radio Sur.
“Dicen que creció el vandalismo en la zona del Parque Lezama pero es una estigmatización del barrio que vemos como una campaña mediática en contra de todos nosotros”, agregó.
El próximo sábado (21 de febrero) los vecinos nucleados en la Asamblea del Parque Lezama realizarán un festival a las cinco de la tarde para difundir la causa: habrá bandas en vivo, talleres y charlas.