Una ambulancia se halló en medio de un tiroteo en la villa 1-11-14, en el Bajo Flores, que causó la muerte de dos personas. Los familiares de las víctimas atacaron y amenazaron a los médicos del Hospital Piñero.
Una ambulancia del SAME que fue a asistir de urgencia a un paciente por un problema cardíaco en la villa 1-11-14 se encontró repentinamente en medio de un feroz tiroteo que dejó el saldo de dos personas muertes: una mujer de 28 años y un joven de 18.
Según relató a los canales de televisión el chofer del vehículo, la balacera comenzó cuando el médico estaba dentro del domicilio del paciente: “Tuve que tirarme al piso… el médico salió custodiado por Gendarmería cubriéndolo de la mejor manera que se pudo para poder irnos del lugar en condiciones bastante fuertes”, relató.
Tras ello, los familiares de las víctimas – y de lo se dirigieron al Hospital Piñero e intentaron entrar a la sala de shock. Allí amenazaron a los médicos en función de exigirles que le salvaran la vida a los heridos.
“Se han perdido muchos códigos. El profesional tiene que salir corriendo por temor a lo que pasa”, señaló Damián Pagano, director del Hospital.
“No podemos seguir con esto. Los médicos quieren cuidar a la sociedad, pero la sociedad también tiene que cuidar a los médicos”, sentenció.