Minutos antes de que comience el partido ante All Boys por la séptima fecha, dos facciones de la barrabrava de Quilmes se enfrentaron en la popular local. La pelea dejó diez heridos, entre ellos varios acuchillados. Uno está en grave estado.
Una vez más tomo tomó notoriedad la compleja connivencia que entrecruza la política, la dirigencia y las barrabravas, y que de tanto en tanto estalla en la cara del fútbol y la opinión pública. A pesar del exagerado número de policías que plagan los estadios, las cámaras y la ausencia total de hinchas visitantes los hechos de violencia continúan sucediéndose con frecuencia en buena parte de las canchas del fútbol argentino.
Minutos antes de que comenzara el partido entre Quilmes y All Boys por la séptima fecha del Torneo Final, las dos facciones disidentes de la barra del “Cervecero” se enfrentaron en la popular local a manotazos, patadas y cuchillazos.
Las imágenes de la pelea fueron capturadas por las cámaras de TyC Sports ya que la Televisión Pública acostumbra no mostrar los hechos de violencia que suceden en las canchas. Con total impunidad, ambos bandos blandieron sus cuchillos – vale la pena aclarar que todos ellos deberían haber pasado obligatoriamente por los controles policiales que se encuentran en las puertas del estadio – y desparramaron sangre por los escalones de cemento.
La pelea por el control de los recursos económicos, políticos y simbólicos dejó el saldo de diez heridos que fueron trasladados al Hospital Isidoro Iriarte de Quilmes. Uno de ellos, llamado Mario Becerra, que en las filmaciones y fotos está de remera roja, sería el hijo de “Dedo” – el supuesto líder de la facción disidente – y se encuentra gravemente herido tras ser golpeado, pateado y acuchillado en reiteradas oportunidades.
Como es costumbre, el partido no se suspendió y All Boys consiguió un triunfo clave ante Quilmes en la lucha por la permanencia. El equipo de Floresta ganó 2 a 1 y se llevo tres puntos valiosos.
Casteglione y Cabrera marcaron los tantos del conjunto visitante que, con el triunfo, no sólo salió de los puestos de abajo sino que además mandó a Quilmes a la zona de descenso directo. El local, por su parte, descontó a través de Caneo.
