A pesar de que se había anunciado un acuerdo, los delegados de la toma aseguraron que la propuesta del juez Vega no fue aceptada y ratificaron que no abandonarán el predio, a pesar de que algunas decenas de personas se retiraron en horas de la mañana. “La gente ya está construyendo algunas viviendas precarias”, aseguraron.
Luego de que se anunciara un acuerdo para que los ocupantes del predio del ex cementerio de autos ubicado en Pola y Fernández de la Cruz, en el barrio porteño de Villa Lugano, abandonaran los terrenos; los delegados de la toma aseguraron que las propuestas gubernamentales no fueron aceptadas y que seguirán allí a la espera de la resolución del conflicto.
“La gente ya está construyendo algunas viviendas precarias. La propuesta del juez no fue aceptada. No hubo ningún acuerdo, sólo hubo propuestas”, aseguró ante las cámaras de televisión Emanuel Díaz, uno de los referentes. “Yo le comenté a la gente la propuesta que hizo el juez y la gente no la aceptó”, agregó.
A pesar de que alrededor de cuarenta personas decidieron irse en horas de la mañana luego de aceptar la propuesta del gobierno, la gran mayoría de los ocupantes decidió permanecer allí. El juez penal y contravencional de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriel Vega, pidió en diálogo con los vecinos desalojar los terrenos, luego de garantizarles en persona la firma de certificados con la promesa gubernamental de atender el reclamo habitacional.
Vega indicó que el entendimiento incluye un compromiso del Gobierno de la Ciudad para incluir a las familias en un plan de viviendas sociales que se construirán en el predio ocupado, tal cual lo contempla la Ley 1770 de 2005, que estipulaba la urbanización de toda la Villa 20 y hasta ahora a sido sistemáticamente incumplida. Los ocupantes, en cambio, dicen que les prometieron subsidios dinerarios.
“Necesitamos que ustedes colaboren y hagan su parte. No pongan en riesgo a sus hijos”, advirtió el juez Vega, dando a entender un posible desalojo por la fuerza en las próximas horas.