La automotriz Mercedes Benz expondrá mañana ante la Corte Suprema de los Estados Unidos, en una audiencia pública, por la desaparición de 17 operarios de su planta argentina, ubicada en Virrey del Pino durante la última dictadura religiosa, cívico militar. 
En los Estados Unidos rige la Ley de Reclamación por Agravios contra Extranjeros (Alien Tort Claims Act), que permite demandar a personas o corporaciones que hayan violado leyes federales allí o en países con los que tiene tratados celebrados, como la Argentina. Los familiares querellantes recurrieron a la Corte estadounidense por la desaparición de 17 operarios, también se la acusa por la apropiación de tres niños y la sustitución de identidad de Paula Logares, nieta recuperada por Abuelas de Plaza de Mayo.
La automotriz alemana, perteneciente a la multinacional Daimler, fue acusada de complicidad con el terrorismo de Estado implementado en la Argentina y por secuestros y torturas a 17 trabajadores, incluyendo la comisión interna de delegados, 14 de los cuales continúan desaparecidos. En Alemania también se inició un proceso judicial contra la firma, que fue rechazado por un argumento similar al utilizado por el dictador Jorge Rafael Videla, en cuanto a la inexistencia de delito por no encontrarse los cuerpos de los desaparecidos.
Uno de los sobrevivientes argentinos Héctor Ratto, fue secuestrado de la planta de González Catán el 13 de agosto de 1977. “Después de participar de una asamblea, vino el gerente (Tasselkraut) y me dijo que había venido a buscarme una gente de civil”, contó el ex empleado de Mercedes Benz en el Juicio por la Verdad. Mientras esperaba en la oficina del jefe, Ratto escuchó que Tasselkraut les daba a los policías el domicilio de Diego Núñez, otro trabajador que secuestraron ese mismo día y que nunca más apareció. Ratto estuvo secuestrado en la comisaría de Ramos Mejía y en Campo de Mayo y fue liberado en marzo de 1979, declaración que fue publicada en el diario Critica de La Argentina el 6 de septiembre de 2008. El trabajador integraba una comisión interna, opuesta a la conducción del sindicato, que impulso una huelga general que terminó en el despido de 115 operarios.
Estos despidos, señala el mismo diario, tuvieron el aval del sindicato SMATA bajo la dirección de José Rodríguez, fallecido en el 2009, luego de conducir el gremio durante 36 años y quien se fue de este mundo con un proceso judicial por fraude, y del entonces ministro de trabajo Ruckauf. “Los 115 despidos eran pedido urgente del entonces ministro de Trabajo, Carlos Ruckauf, y de la dirección de SMATA, que había pedido más despidos todavía. La actuación de la dirección de la empresa Mercedes Benz Argentina aclara que quería apoyar el esfuerzo de ambos de eliminar elementos subversivos de las fábricas”, decía un informe que la empresa había elaborado sobre el conflicto laboral de 1975 y que envió como aclaración a la Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas (FITIM) el 19 de mayo de 1976.
La Audiencia
En la Audiencia Pública de mañana, la querella estará representada por el abogado Terrence Collingsworth, especialista en litigios contra multinacionales que violan los derechos humanos y laborales en la justicia . Tiene pendientes causas contra grandes empresas como Del Monte, ExxonMobil, Coca-Cola, Dyncorp, Wal-Mart, Bridgestone-Firestone y Chiquita Brands International.
Collingsworth expondrá ante los jueces durante 30 minutos, los representantes de la Mercedes Benz, tendrán el mismo tiempo. También expondrá el Departamento de Justicia norteamericano, en calidad de “amigo del tribunal”
La demanda civil por daños y perjuicios denominada “Daimler AG v Barbara Bauman” se inició en 2004 y llegó al Máximo Tribunal de los Estados Unidos luego de que fuera rechazada en dos instancias previas –la última en el 2009– que derivaron en que la Corte de Apelaciones del noveno circuito de California se pronunciara al año siguiente por la anulación de esos fallos y por la competencia, además de rechazar las apelaciones de Daimler. En la Argentina, las desapariciones de trabajadores de Mercedes Benz se comenzaron a investigar durante los juicios por la Verdad, en los que el tribunal no tenía facultad de condenar, cabe recordar que estos juicios se iniciaron en 1998 en el Tribunal de La Plata, por una presentación de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de La Plata (APDH La Plata) y se recopilaron más de 2200 expedientes, y declarado más de 800 víctimas. Aunque no tenían efectos penales, por los testimoniales de las víctimas, surgieron procesos penales, por ejemplo, Von Wernich y Etchecolatz.
Según la información reunida en el expediente, Mercedes Benz –hoy Daimler AG–, sería el principal proveedor de camiones Unimog del Ejército. La sede local donó equipamiento neonatológico a una maternidad clandestina , el entonces jefe de seguridad fue apropiador de una niña, hija de desaparecidos y el ex gerente, Juan Tasselkraut, señalado por Ratto, entregó a los militares las direcciones de algunos de los empleados, que luego fueron secuestrados.
Con la anulación de las leyes de obediencia debida y punto final, la causa de Mercedez Benz, recayó en el Juzgado Federal 2 de San Martín sin avances hasta hoy.
