Los barrios llamados Villa 21-24 de barracas que viven en el margen del Riachuelo, registraron casos de familias con severos problemas de salud por tener plomo en la sangre. Luego de dos años de reuniones y promesas postergadas, ayer se movilizaron en frente del Instituto de la Vivienda porteño para exigir una reubicación digna.
En la zona porteña de Barracas vecinos le reclamaron al IVC (Instituto de la Vivienda) la inmediata reubicación de los vecinos más afectados en su salud, como plomo o mercurio en sangre, o complicaciones dermatológicas.
“Un 30% de los chicos que viven en el Meandro de Brian están enfermos con plomo en sangre, tienen problemas respiratorios, dermatológicos, incluso hay personas con cáncer, y estamos luchando para que salgan ellos primero, y esperamos que el IVC nos escuche”, destacó una vecina del barrio.
El Camino de Sirga es un camino que costea el Riachuelo, donde las casas están hechas en montañas de basura que terminan en el río, y bajo una de esas montañas se despiden los desechos de las cloacas del barrio. En ese mismo lugar tres veces por día pasa un tren carguero.
Además se realiza la descarga de camiones con decenas de bolsas de productos para reciclaje, como cartones y botellas, donde muchas de esas familias del Camino de Sirga viven de la recuperación urbana.
Sin duda el Camino de Sirga en la manzana 25 es la zona más afectada, allí vive Rossana Barijho, integrante del Frente Popular Darío Santillán y madre de dos chicos quien declaró: “A nosotros se nos está por derrumbar la casa. Cuando uno quiere arreglarla, el gobierno dice que no se puede porque está en el Camino de Sirga. Pero después no hay respuesta sobre la relocalización. Mi hijo tiene plomo en sangre y la contaminación es cada vez mayor. Yo no quiero vivir con lujos, sólo pido agua potable y una casa digna”, afirmó.
Gustavo Moreno, asesor tutelar de Cámara del Poder Judicial de la Ciudad, de acuerdo a la última audiencia del día lunes dijo “aún no hay respuestas, el Instituto de la Vivienda no consiguió terrenos para las 500 familias que faltan y no se respetan prioridades de las familias que deben salir ya por cuestiones sanitarias, que están en la manzana 25. Esto depende de la voluntad política y el macrismo parece no tenerla, acá no hay voluntad decisión de dar respuesta a la sanidad de cientos de chicos que tienen plomo en sangre”.
Ante la negativa del gobierno porteño de que no hay terrenos disponibles para que los vecinos sean reubicados en el mismo barrio, los delegados del Camino de Sirga se buscaron terrenos en la zona para que la Ciudad construya las viviendas allí como ser los terrenos de Pepirí 1587, 1593 y Diógenes Taborda 1542/1546 y 1550/1562. Sin embargo luego de varias horas de movilización y una breve reunión, los vecinos nuevamente se fueron sin respuesta, pero con la convicción de continuar con la lucha.