Expropian tierras a Altos Paraná SA en Misiones. La Cámara de Representantes de Misiones aprobó la expropiación de 600 hectáreas del predio que la multinacional Alto Paraná tiene en Puerto Piray, para entregar a unas 250 familias de productores, que deberán constituirse en cooperativa.

Alto Paraná S.A. (APSA) es la empresa forestal más importante de la Argentina y una de las más grandes de América Latina. Creada en 1975,  estuvo en manos de capitales privados argentinos hasta 1996, cuando fue vendida al grupo chileno Arauco.

En Misiones, la compañía concentra la mayor cantidad de tierras: 232.000 hectáreas. Sin embargo, organizaciones campesinas afirman que, si se suman los territorios explotados por testaferros, arrendamientos de tierra y otros tipos de manejo indirecto de la tierra, la firma chilena superaría las 280 mil hectáreas, equivalentes al 10% por ciento de la superficie total de la provincia de Misiones. En dicha provincia, Altos Paraná S.A. maneja actualmente una fábrica de pasta celulósica asentada en la localidad de Puerto Esperanza, dos aserraderos, dos viveros, y una planta de remanufactura y una fábrica de tableros de mediana densidad (MDF), el mayor aserradero de la Argentina, con sede en Puerto Piray.

Tras casi una década de lucha, la Cámara de Representantes de Misiones declaró de interés público, y sujetas a compraventa o expropiación, 600 hectáreas pertenecientes a la empresa Alto Paraná, ubicadas en los barrios Santa Teresa, Unión y Cruces de esa localidad. La iniciativa, presentada por Carlos Rovira y otros legisladores, se dió como consecuencia de la petición efectuada por los mismos productores. La ley declara de utilidad pública las 600 hectáreas y autoriza al Poder Ejecutivo a actuar en calidad de sujeto expropiante, para luego proceder a donarlas a la Asociación de Productores Independientes de Puerto Piray, quienes tendrán que constituirse en cooperativa para acceder a este beneficio, y no podrán subdividir el predio ni transferir su propiedad.

Miriam Samudio, delegada de la asociación Productores Independientes de Piray (PIP), aseguró que, aunque no sean las 3 mil hectáreas que se habían planteado expropiar, es un buen resultado.  “Nos dijeron que la entrega sería algo rápido nosotros no podemos esperar más años, anhelamos que esto pueda darse en este año”. “Primeros queremos tener en mano y luego en asamblea se definiría como se repartiría. Hay familias que tienen decidió ya que hacer” agregó.

“Los Productores Independientes de Piray necesitan de tierras que les permitan llevar adelante procesos productivos sostenibles que les aseguren un presente y un futuro más digno, y salvaguardar los vínculos ancestrales con la tierra que los vio nacer”, aseguró. De las 600 hectáreas serían beneficiadas alrededor de 250 familias.

 

 

 

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