Con lo justo el gobierno nacional aprobó la ley de blanqueo de capitales. La ley permite traer dólares del exterior e invertirlos en bonos de desarrollo energético o en el mercado inmobiliario.
Con 130 votos a favor y 107 en contra, se aprobó la ley de blanqueo de capitales en la Cámara de Diputados, tras varias horas de sesión. El Frente para la Victoria (FpV), con el apoyo de los interbloques aliados, buscó sancionarla para que entre en vigencia a partir del 1 de junio.
Desde ese entonces, se podrá concretar el Se, sólo en dólares,a través de ciertos instrumentos financieros creados por el Gobierno como el Certificado de Depósito para Inversión (más conocido como CEDIN) para la compra de inmuebles o el financiamiento de la construcción; o también el Bono Argentino de Ahorro para el Desarrollo Económico (Baade). Éste último también en formato de pagaré, para financiar proyectos energéticos. La ley aclara, asimismo, que no será requerida ninguna justificación sobre el origen de los fondos, al mismo tiempo que los que los obtengan no tributaran impuestos por su declaración.
