Ayer jueves, luego del entrenamiento matutino, alrededor de 150 barras ingresaron al estadio Tomás Ducó a la fuerza. Rompieron autos, robaron dinero y golpearon a los jugadores. Además amenazaron al DT Juan Manuel Llop, que evalúa renunciar.
Huracán atraviesa uno de los peores momentos de su historia. Hundido en la B Nacional, ayer quedó eliminado dela Copa Argentina en los dieciseisavos de final, ante Godoy Cruz por penales. A poco mas de dos meses para el final de la temporada, se quedó sin objetivos tangibles.
Sumado a la dura actualidad deportiva, lo de ayer rebalsó el vaso. Los jugadores se retiraban del Estadio luego de la práctica, cuando fueron sorprendidos por dos micros con alrededor de 150 barras. Los violentos se deshicieron del control de seguridad –un hombre- e ingresaron a las instalaciones. Allí, rompieron autos, robaron plata, y les pegaron a los jugadores reclamando “mas actitud”.
Ante semejante hecho, varios jugadores y hasta el mismo Juan Manuel Llop, DT de Huracán analizaban hoy rescindir sus contratos con el club. “No tengo ganas de ir a entrenar, porque si llegamos a perder frente a Atlético Tucumán –rival del próximo fin de semana- esto va a ser todavía peor” declaró un futbolista del plantel.
En tanto, Llop no ocultó su bronca: “Es muy difícil trabajar así. Vamos a evaluar qué hacemos y definiremos mañana. Cuando hay este tipo de situaciones, uno se siente emocionalmente tocado. Y toma decisiones en caliente. Hay que dejar que pase un tiempo y luego, con más frialdad, evaluar los pasos siguientes”
Finalmente, el presidente Alejandro Nadur radicó la denuncia en la comisaría 32 de Parque Patricios. “Fueron 150 barras los que entraron al estadio. Estoy tratando de levantar a Huracán. Tengo mucha angustia. Esta gente no me va a quitar las fuerzas”, cerró Nadur.
