La Organización de los Estados Americanos (OEA) reconoció a Nicolas Maduro como presidente de Venezuela; sin embargo, el gobierno de Barack Obama todavía no lo reconoce. La marcha al Consejo Nacional Electoral en Caracas anunciada para hoy fue suspendida por Capriles tras la advertencia de Maduro de que no la permitiría.
Ayer por la tarde, luego de que se lo acusara desde el oficialismo de ser el culpable de las siete muertes generadas por los diversos enfrentamientos y escaramuzas entre chavistas y seguidores de Capriles; el candidato por la oposición suspendió la gran marcha prevista para este miércoles en la capital venezolana que esperaba llegar hasta la sede principal del Consejo Nacional Electoral (CNE).
El gobernador del estado de Miranda arguyó el tener información clara y precisa de que el gobierno venezolano se proponía infiltrarse en la marcha para generar más violencia y disturbios, en función de llamar la atención con incidentes en lugar de hablar y discutir en torno al recuento “voto por voto” solicitado por la oposición.
En este contexto, fueron removidos de sus cargos los parlamentarios por la Mesa de Unidad Democrática (MUD) Nora Bravo (Ambiente), Miguel Ángel Rodríguez (Cultura), Dinorah Figuera (Familia) y William Davila (Ciencia y Tecnologia); ya que se negaron, al igual que Capriles, a reconocer a Nicolás Maduro como presidente legítimo.
Hoy por la mañana, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), reconoció el triunfó de Maduro en las elecciones presidenciales de Venezuela; desactivando así una de las cartas fundamentales que contaba Capriles para negarse a su reconocimiento. “Creo que un recuento era bueno para el proceso electoral”, señaló el titular de la organización respecto del primer comunicado enviado luego de conocido el resultado de las elecciones (tanto la OEA, como Estados Unidos y varios países europeos habían apoyado el recuento de votos solicitado por Capriles). “No cambio mi opinión de fondo, creo que es necesario llevar adelante un diálogo en Venezuela, la democracia se gana por un voto”, agregó.
A pesar de que parece parcialmente desbaratada la posibilidad de Capriles de continuar con las acciones hostiles, ya que llamó a sus seguidores a “replegarse en sus casas”, el clima en Venezuela continúa enrarecido.
El secretario de gobierno estadounidense, John Kerry, anunció hoy que Estados Unidos no reconoce a Maduro debido a “gigantescas irregularidades”; al mismo tiempo que lo urgió a llevar adelante el recuento de votos. En la misma sesión de la Cámara baja, Ros-Lehtinen, congresista republicana, llamó a no legitimar “las destructivas y corruptas políticas de alguien fiel al chavismo” hasta que se haga “un recuento y auditoría de los votos transparente“. Kerry aseguró, además, que no enviarán a ningun representante del gobierno norteamericano a la asunción del próximo viernes 19 de abril.
Por lo visto no será fácil para Nicolás Maduro la gobernabilidad en los próximos meses, sumado a que la postergación del reconocimiento de su legitimidad por parte de algunos países constituye aún una fuente inagotable de problemas. Incluso se habla ya de que, en el mejor de los casos, tendrá que enfrentar dentro de tres años un referéndum revocatorio, posibilidad establecida en la Constitución venezolana aprobada en 1999, durante la presidencia de Hugo Chávez; escenario legal al que apostaría la oposición venezolana “constitucionalista”.