La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el envío de seis proyectos de reforma del Poder Judicial al Congreso Nacional en función de la “democratización de la justicia” para ser analizados hoy. La UCR, El Partido Socialista y el Frente Amplio Progresista (FAP) anunciaron que no estarán presentes y que solo asistirán al debate de la próxima semana.
Ayer por la mañana ingresaron al Congreso Nacional los proyectos de ley para la reforma del Poder Judicial para ser analizados por la Cámara de Diputados y de Senadores a partir de hoy
En la Cámara de Diputados ingresó el proyecto de ley para regular y democratizar el ingreso de personal al poder Judicial, mediante la reforma al sistema de concursos. Asimismo, deberán tratar la ley que encomienda dar carácter público y libre acceso a todas las declaraciones juradas de los funcionaros públicos; como también la publicación vía web de todas las decisiones dictaminadas por la Corte Suprema de Justicia.
Por el lado de la Cámara de Senadores, deberá tratarse el proyecto para la limitación de las medidas cautelares; asi como también la ampliación del número de los miembros del Consejo de la Magistratura y la modificación del sistema mediante el cual son electos. El proyecto de reforma preveé elevar de 13 a 19 los miembros del Consejo, al mismo tiempo que establece que cinco de los seis nuevos que se incorporan sean jueces, académicos y científicos de cualquier carrera y el otro restante abogado; serían elegidos mediante el voto en las próximas elecciones primarias, abiertas, simultaneas y obligatorias (PASO) y deben presentarse como candidatos de los partidos políticos. Se debatirá, además, la creación de tres nuevas cámaras de Casación en los fueros Civil y Comercial, Penal Económico y Contencioso Administrativo.
Para Rozanski, juez federal de La Plata, el hecho de “transformar la ocupación de una silla (en el Consejo) en base a la decisión de una corporación de 1500 o 2000 personas y llevarlo a la decisión de 40 millones de personas, como lo hacen con el resto de los poderes, es un acto revolucionario“. Respecto de la ley que gira en torno de la limitación de las medidas cautelares, Sabatella indicó: “Suelen ser usadas para cajonear la Justicia y suspender por largos períodos que las leyes puedan aplicarse. Y lo más grave de eso es cuando con ellas se protege a grupos con enorme poder económico y capacidad de lobby”.
Desde el arco opositor surgieron diversas críticas, apelando que bajo las diversas leyes presentadas ante el Congreso se esconde la intención de maniatar al poder judicial, al mismo tiempo que impone límites y controles a los jueces. Entre ellos, Julio Piumato señaló: “Lejos de democratizar ese poder del Estado se va por un callejón peligroso para la independencia de la Justicia”.
En conferencia de prensa el bloque opositor de la UCR, FAP y el Socialismo emitió anuncios a través del senador socialista Rubén Giustiniani, quien aclaró que “solo los kirchneristas convalidaron este debate previo al que no asistirán, sí lo harán, aclaró, el jueves próximo, cuando podría citarse a sesión en la Cámara alta”
Por su parte, el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, declaró que no se manifestará sobre el tema ya que, según sus propias palabras, “Quienes deben opinar y discutir ahora son los parlamentarios, dio casi por hecho que una vez que se aprueben, las leyes en cuestión se judicializarán y la Corte tendrá que opinar sobre su constitucionalidad. Luego agregó que lo que sea que decida el tribunal será con “independencia” y en “beneficio del pueblo”