Son 7 los efectivos que pasan a disponibilidad de Gendarmería y Prefectura . Esta medida no tiene que ver con los reclamos salariales ni con el petitorio , sino por no volver a sus unidades de trabajo y bloquear los edificios Centinela y Guardacostas, impidiendo su actividad normal. Esta decisión se toma 48 horas después de haber encontrado una respuesta gubernamental a los motivos originales de la protesta.
Entre los pasados a disponibilidad están Raúl Maza, vocero de los amotinados de Gendarmería, un oficial de Salta que realizó declaraciones agraviantes, tres efectivos de Prefectura y otros dos de Gendarmería. El pase a disponibilidad significa que se les abre un sumario y los jefes resolverán qué sanciones corresponden e incluso su apartamiento de la respectiva fuerza.
En diálogos que mantuvieron los sublevados con el secretario de Seguridad, Sergio Berni el viernes éste les advirtió que se debía recomponer la cadena de mandos, despejar las calles y los edificios, y que el personal reunido allí regrese a los puestos de trabajo.
Raúl Maza, vocero de los gendarmes, dijo que Berni se comprometió a no sancionar por la protesta, pero en Gendarmería sostuvieron que el pase a disponibilidad tiene que ver con que no se acatan órdenes, no con la protesta por un salario digno como ellos reclamaron en un comienzo. “No hay que alarmarse. Quieren frenar la protesta, pero nosotros seguiremos adelante porque esta es una protesta constitucional”, sostuvo ayer Maza.
Una asamblea se llevó a cabo ayer en el Guardacostas y el Centinela , incluyendo familiares y amigos de los efectivos. La jueza de la Corte Suprema de Justicia Elena Highton de Nolasco, dijo que “hay que tener cuidado con este reclamo. No son lo mismo que cualquier trabajador. Prestan un servicio armado”
